Cuando Marcelo Torres asumió el compromiso de liderar un espacio tan grande como heterogéneo lo hizo con un objetivo primordial: “Ser la voz de los que no la tienen”. Y por supuesto, para ello deberá imponerse con el Frente Cívico Vecinal en los comicios municipales del próximo 20 de septiembre en Laboulaye.
El candidato que nuclea en su fuerza a peronistas, radicales, juecistas, socialistas e independientes se mostró conforme con las repercusiones tras la presentación de su lista la pasada semana. “Queremos trabajar por y para Laboulaye. Hemos vuelto al vecinalismo, que es la esencia de este frente. En el 2003 junto a Julio Palloni formamos la primer Junta Vecinal Municipal Nueva Gente, por eso llevamos el ADN de esta idea. En 2015 volvimos a las fuentes, como solución a los problemas de una localidad como la nuestra”, inició Torres en una entrevista concedida a Nexos en la mañana de hoy.
El postulante lleva a cabo por estos días un intenso recorrido por los barrios, casa por casa y puerta a puerta, reuniéndose con vecinos e instituciones. “Le llevamos las soluciones de la plataforma de campaña y escuchamos sus necesidades”, amplió el penalista, quien estuvo acompañado por el candidato a primer concejal Federico Palloni.
Sobre el grupo que lidera dijo que existe solo un requisito para integrarlo: “Ser buena gente y trabajar incansablemente con fuerza y vocación. Es muy bueno que lleguen desde distintos orígenes políticos, porque tanto el peronismo con su justicia social, el radicalismo con su convicción republicana y la igualdad del socialismo nos aportan mucho al servicio de nuestro pueblo”.
Federico Palloni, hermano del legislador electo, Fernando, coincidió con Torres: “Entramos a los barrios y nos encontramos con una realidad muy dura que nos llegó al corazón. Nuestra finalidad en la política es hacer el bien, trabajando para cubrir las necesidades de la gente. La cuestión de la pobreza, por ejemplo, es un problema nacional que debe solucionarse allí; pero la municipalidad tiene mucho para hacer en este sentido, lo cual significa mucho para quienes lo necesitan”.
El abogado siente que se ha generado mucha empatía entre los ciudadanos y su espacio político. “Tenemos muchos encuentros en los barrios a los que asisten en promedio entre 30 y 40 personas. Estuvimos en el Belgrano, 8 de Octubre, Arroyito, Matadero, Chacarita, lugares donde hay una gran desprotección social. Por esto tenemos que ser la voz de aquellos que no la tienen, porque nadie está hablando de la marginalidad y extensión de la pobreza que existen en la ciudad”.
Por último, Torres exigió el debate público entre los tres candidatos: “Creo que la gente no quiere peleas de políticos. Eso es para peleas de vedettes en Intrusos. Hace unos días visité un barrio, allí en una pequeña pieza vivían cinco personas bajo un techo de chapa roto. A esa gente no le interesa si nos peleamos, pero sí qué proponemos para ellos y Laboulaye. Lo menos que le debemos es el debate. El que no está dispuesto a debatir no tiene ideas concretas. Que respondan si lo harán o no”.
El candidato del FCV le envió un mensaje a aquellos que aún están indecisos sobre su sufragio: “Conformamos un grupo amplio y no con visión cerrada como los partidos tradicionales que gobiernan hace más de 30 años y han detenido el progreso. Nosotros pedimos cuatro años de oportunidad para hacer las cosas bien, porque los demás ya tuvieron su momento”.
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