Luego del mediodía de hoy, la Cámara del Crimen de Laboulaye y el Jurado Popular condenaron a prisión perpetua a María Belén Barroso, imputada como coautora material del homicidio criminis causa agravado por robo calificado por uso de arma de Graciela Liliana Chiapello, ocurrido el 18 de julio de 2012.
El fiscal de Cámara, Carlos Wenceslao Zabala, había pedido 16 años para la madre de tres hijos, mientras que la querella representada por Raúl Frencia sugirió la pena anteriormente detallada y la defensa a cargo del Dr. Marcelo Salva, solicitó la absolución total de Barroso.
La mujer fue encontrada penalmente responsable del hecho ocurrido en la noche de dicha fecha, aunque Zabala alegó que no fue Barroso quien asestó el golpe que terminó con la vida de Chiapello. Un celular que la victimaria había regalado y que perteneciera a la víctima y una motocicleta que fue sustraída de la escena del crimen y que también fuera de Graciela, fueron los indicios que tanto el fiscal como Frencia expusieron y que siguieron el Tribunal y el Jurado Popular.
Además, el material genético encontrado en las uñas de la víctima coincidió en alto porcentaje con el de Barroso, lo cual hizo imposible excluir su participación en el hecho.
También, unos anteojos que fueron secuestrados en un allanamiento realizado en el domicilio del padre de Barroso, lugar donde habitaba ésta, y que ningún habitante de la casa dijo usar, fue otro elemento que la involucró.
Visiblemente consternada y tras los alegatos, Belén no hizo uso de la palabra. Luego del fallo condenatorio, fue puesta a disposición policial y será trasladada en las próximas horas a la unidad penitenciaria de Bouwer.